Escrito por: Enio Daniel Gómez*
Desechad el amor al prójimo,
compasión, signo de debilidad
¡A un lado enfermos y menesterosos
vuestra voluntad os digo,
está más allá del bien y el mal!
No importa la desdicha del mendigo
no tengáis benevolencia ni piedad
el hombre es algo que debe ser superado
¡Os enseño al superhombre!
<Poder> ha de ser vuestra voluntad.
¡Así habló Zaratustra!
a todas las virtudes ha condenado
aniquilador es él de la moral
animal hace al hombre,
errante y desamparado.
Muerte de Dios es mera opinión,
de hombre que se predica a sí mismo
no hay superhombre, hombrecillos hay
hay hombre que se piensa divino.
Habló así Zaratustra
predicando al hombre animalado,
voluntad de poder y autonomía
preludio del hombre desdichado.
¿Así habla Zaratustra?
¡Mejor es seguir al Hidalgo!
virtud es deshacer entuertos,
cobardía es desdeñarlos.
¡No es muerte de Dios es muerte del hombre,
Zaratustra eres mentecato!
Übermensch? ¡Megalomanía!
¡boca grande y espíritu flaco!
Infrahombre eres Zaratustra,
a las ruinas al hombre has llevado
equivocarse es error humano
perseverar en ello es demoníaco.
Es mejor hacerse escudero,
antes que un mero fullero
Don Quijote es cuerdo en la locura
buscando en el tiempo lo eterno.
Palabra unida a la verdad,
verdad unida a la palabra
palabra es el hombre,
y el superhombre mera perorata.
¿Por qué no ser como Quijote?
andante y noble caballero
de horizontes abriendo ventanas
sin vanagloria y sin menosprecio.
¿Por qué no ser como Sancho?
valiente y noble escudero
concienzudo es de su ignorancia
a la verdad abierta sin recelo.
Seamos Quijote y Sancho
locos en el mundo del revés
por la senda de la virtud estrecha
haciendo justicia y prodigando el bien.
Si cambiar al mundo es utopía,
sea utopía a nosotros cambiar.
El mundo precisa nobles Quijotes
pues de “superhombres”, lleno está.
*Enio Daniel Gómez, alumno del Programa de Humanidades Integradas